El Gobierno vuelve a bajar las retenciones a la carne, pero fue más un gesto que un alivio económico
Si bien se especulaba con que podía eliminar las retenciones que restan a la carne vacuna, en el acto inaugural de la 137° edición de la Exposición Rural, el presidente Javier Milei anunció una rebaja de las tasas de los derechos de exportación para las carnes vacuna y aviar, así como para los principales granos.
Ahora, la carne bovina que no sea de la categoría vaca (que ya no tiene retenciones) pasará de pagar 6,75% a 5%, al igual que la aviar. En tanto, las retenciones al maíz y al sorgo bajarán de 12% a 9,5%; las retenciones al girasol de 7,5% y 5% a 5,5% y 4%, y las retenciones a la soja, del 33% al 26% en el caso de los granos, y del 31% al 24,5% en el de los subproductos.
En rigor, esta rebaja a los granos ya se había aplicado con carácter transitorio entre el 26 de enero y el 30 de junio. Antes del vencimiento se anunció que se mantendría hasta el año próximo para trigo y cebada (que estaban sembrándose), mientras que las alícuotas del resto de los granos y subproductos volvieron a subir el 1 de julio, en medio de muchas protestas del sector agropecuario. Ahora, volverán para todos estos productos las alícuotas del primer semestre y, según se anunció, ya no volverán a subir.
Las entidades de productores valoraron positivamente los anuncios, como señal de que fueron escuchadas y de que el Gobierno quiere avanzar en el rumbo de eliminarlas, además de la promesa de que esta reducción parcial es definitiva. En off, para muchos tuvo gusto a poco, pero creen que la administración Milei hizo lo que podía con el actual margen de acción que tiene. En el caso de los granos, sostuvieron que descomprime una situación delicada, a diferencia de lo que ocurre con la ganadería.
Por otro lado, fuentes de la industria de la carne opinaron que la rebaja a la carne no tiene impacto económico. “No ayuda esta rebaja, pero si fuera mayor se trasladaría automáticamente al precio de la hacienda, lo cual nos complicaría más de lo que estamos”, opinaron desde un frigorífico. “Espero que esta señal sea un incentivo positivo para los productores, para que podamos incrementar un poco el stock”, indicó otra fuente industrial, en tanto un tercero señaló: “Esto no mueve la aguja (no modifica nada); solo nos queda cruzar los dedos para que Trump nos regale algo”, en alusión a la posibilidad rumoreada de que la Argentina estaría negociando con Estados Unidos una ampliación de la cuota arancelaria de carne, actualmente de 20.000 toneladas anuales que, según las versiones más optimistas, podría llevarse a 80.000 toneladas.
Anualizando las divisas generadas por la exportación de carne vacuna en el primer semestre del año (serían unos US$ 3,17 miles de millones), y asumiendo que 50% provienen de la exportación de carne de novillo, el “ahorro” anual para el sector por la rebaja de 1,75% en el impuesto a la exportación no llegaría a US$ 24 millones anuales, 0,7% del monto exportado.

Foto: La Nación